En la era digital, donde cada instante parece merecer una fotografía y cada logro ajeno se convierte en una historia compartida, ha surgido un fenómeno psicológico que impacta silenciosamente a millones de personas: el FOMO. Acrónimo de Fear Of Missing Out (miedo a quedarse fuera), el FOMO es más que una moda pasajera en redes sociales; es una fuente real de ansiedad, insatisfacción y malestar emocional.
El origen del FOMO
Aunque el término fue acuñado oficialmente en 2004, la sensación de perderse algo importante ha existido siempre. Sin embargo, las redes sociales han amplificado esta percepción. Ver en tiempo real lo que otros hacen, disfrutan o logran, despierta una necesidad constante de estar conectados, de participar en todo y de no “quedarnos atrás”.
Cómo afecta el FOMO a la salud mental
El FOMO no es inofensivo. Numerosos estudios lo vinculan con síntomas de ansiedad, baja autoestima, trastornos del sueño y depresión. Las personas atrapadas en esta dinámica tienden a comparar sus vidas con las de los demás —muchas veces sin recordar que lo que se muestra online es solo una versión editada de la realidad—. Esta comparación constante puede derivar en una insatisfacción crónica, alimentada por la idea errónea de que siempre hay algo mejor ocurriendo en otro lugar.
Señales de que podrías estar sufriendo FOMO
- Revisión compulsiva de redes sociales.
- Sensación de ansiedad o irritabilidad al estar desconectado.
- Dificultad para disfrutar el presente por pensar en lo que otros están haciendo.
- Comparaciones constantes con los logros o estilos de vida ajenos.
Cómo combatirlo y recuperar tu bienestar
Superar el FOMO implica reconectar contigo mismo. Algunas estrategias incluyen:
- Practicar la atención plena (mindfulness).
- Limitar el tiempo de pantalla.
- Establecer rutinas digitales saludables.
- Aceptar que no es posible estar en todo, ni se necesita.
Tecnología al servicio de tu salud mental
La tecnología, que muchas veces alimenta el FOMO, también puede formar parte de la solución. Wellat Technologies es un ejemplo de cómo la innovación puede ponerse al servicio del bienestar emocional. A través de soluciones digitales centradas en la salud mental y la regulación emocional, Wellat ayuda a las personas a reconectar con lo esencial, a gestionar el estrés digital y a cultivar una vida más plena, presente y equilibrada.
“No necesitas estar en todas partes, necesitas estar dónde importa.“